Hay suficiente evidencia científica y razones fisiológicas para afirmar que las mejores horas para practicar el ayuno intermitente van desde la tarde hasta el día siguiente. O sea, es más beneficioso que la última ingesta sea en horas más diurnas, tipo a las seis o siete de la tarde.
Quiero comenzar por aclarar que las mejores horas para hacer ayuno intermitente son aquellas que encajan en tus ritmos naturales, en tu rutina diaria y en tus sensaciones reales de hambre. El ayuno debería adaptarse a ti y no al contrario.
Hay personas que prefieren ayunar por la mañana, otras que prefieren hacerlo en la tarde noche y otras que prefieren comer una vez antes del trabajo y al volver del trabajo vuelven a comer, o sea, ayunan durante sus horas laborables.
Hay personas que se levantan sin hambre y les es imposible desayunar antes de ir al trabajo y prefieren desayunar durante sus horas laborables, a las 10 u 11 de la mañana, cuando de verdad sienten hambre. Y sí, saltarse el desayuno puede ser saludable, sobre todo cuando tu cuerpo no pide alimento nada más levantarte.
Hay personas que en cambio sí se levantan con hambre y sienten de verdad que necesitan ese desayuno y les sale "natural" ayunar desde las 17-18h de la tarde en adelante.
De hecho muchas personas practican ayuno intermitente cada día, porque les viene de forma totalmente natural, sobre todo si como estrategia han decidido combinar la dieta cetogénica con el ayuno.
Pero en general, ¿Qué es mejor, saltarse el desayuno o saltarse la cena cuando practicamos ayuno intermitente?
Bien, desde un punto de vista fisiológico (y además así lo muestran los estudios) es más favorable ayunar desde la tarde hasta el día siguiente. O sea, que la última ingesta sea en horas más diurnas, tipo a las seis o siete de la tarde máximo, siendo esto lo que más se adecúa a nuestra fisiología.
Esto es porque en horas más tardías de la tarde noche tenemos peor respuesta a la insulina y la glucemia en sangre tiende a elevarse más y mantenerse más tiempo elevada, entre otras razones. Y esto por no hablar de que adelantando esa última ingesta a horas más diurnas favoreceremos un descanso más profundo y reparador lo que nos ayudará a mantener los niveles de cortisol más controlados.
Tanto optimizar nuestra respuesta a la insulina como favorecer un descanso reparador son fundamentales tanto si nuestro objetivo es perder peso con el ayuno intermitente como si es obtener, en general, todos los beneficios de la práctica del ayuno.
RESUMEN
Hay suficiente evidencia científica y razones fisiológicas para afirmar que las mejores horas para practicar el ayuno intermitente van desde la tarde hasta el día siguiente. O sea, es más beneficioso que la última ingesta sea en horas más diurnas, tipo a las seis o siete de la tarde. Esto es porque en horas más tardías de la tarde noche tenemos peor respuesta a la insulina y la glucemia en sangre tiende a elevarse más y mantenerse más tiempo elevada y porque favorecemos un descanso más reparador y con ello controlamos los niveles de cortisol. Pero cabe destacar también que las mejores horas para hacer ayuno intermitente son aquellas que encajan en tus ritmos naturales, en tu rutina diaria y en tus sensaciones reales de hambre. El ayuno debería adaptarse a ti y no al contrario.
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Ayuno Intermitente para Principiantes
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Un fuerte abrazo,
Cristina