El ayuno intermitente puede ser una excelente estrategia para quemar más grasa y lograr adelgazar. Gracias al ayuno intermitente el margen de horas en las cuales no estimulamos a la hormona insulina se amplía y esto favorece que entremos en metabolismo lipolítico (o sea, de las grasas) y podremos quemar más grasa, de forma más eficiente, y además sin necesariamente pasar hambre.
¿Qué mecanismo hace que adelgacemos con el ayuno intermitente?
El mecanismo del ayuno es simple: ampliamos la ventana de horas en las cuales no ingerimos alimento y con ello logramos reducir los niveles de insulina, que es la hormona clave que dicta a la célula qué energía se debe utilizar, glucosa o grasas.
Si te estás preguntado si es necesario combinar el ayuno con el déficit calórico para lograr adelgazar te dire que no, no es un requisito.
¿Por qué nos es tan difícil quemar grasa corporal?
En la alimentación del mundo moderno occidental, llena de azúcares y carbohidratos refinados, grasas de mala calidad y comiendo muchas veces al día, es difícil que entremos en metabolismo lipolítico (el de las grasas) porque este patrón alimentario moderno hace que la insulina esté elevada todo el tiempo y que dependamos de la glucosa todo el tiempo, sin poder acceder a la quema de grasa.
Da igual cuántos kilos de grasa tengamos acumulados en nuestro cuerpo. No podemos acceder a ella porque la insulina elevada no lo permite.
¿Cómo ayuda el ayuno intermitente a quemar grasa?
El acto de practicar el ayuno va a favorecer que tus niveles de insulina bajen a niveles basales y con ello la quema de grasa puede tener lugar.
¿Qué tiene que ocurrir para que podamos quemar grasa corporal?
La condición para que podamos quemar grasa es que la insulina esté baja. La condición para que acumulemos grasa es que la insulina esté elevada. Es una simplificación de unos procesos bastante más complejos. Pero llévate esa idea.
Y llegado este punto me gustaría además aclarar que podemos adelgazar con el ayuno intermitente sin necesidad de hacer déficit calórico.
La pérdida de peso: uno de los grandes beneficios del ayuno intermitente
La pérdida de peso es uno de los grandes beneficios del ayuno intermitente y es con esta intención que muchas personas lo practican, logrando a menudo buenos resultados.
Además, podemos lograr estos objetivos de pérdida de peso sin necesariamente pasar hambre, ya que los cuerpos cetónicos (derivados de la cetosis nutricional) que produciremos son muy anorexígenos, o sea, inhiben el apetito.
El control del apetito es además otro de los factores clave en cuanto al éxito del ayuno intermitente como herramienta para quemar más grasa y adelgazar. Eso sin contar su simplicidad y facilidad de ejecución.
Y por supuesto, para hacer las cosas bien, la dieta, calidad de los alimentos y aporte de energía y nutrientes debería cuidarse a la vez que nos ayudamos del ayuno para perder peso.
RESUMEN
El ayuno intermitente puede ser una excelente estrategia para quemar más grasa y lograr adelgazar. Gracias al ayuno intermitente el margen de horas en las cuales no estimulamos a la hormona insulina se amplía y esto favorece que entremos en metabolismo lipolítico (o sea, de las grasas) y podremos quemar más grasa, de forma más eficiente, y además sin necesariamente pasar hambre ya que los cuerpos cetónicos que produciremos son muy anorexígenos, o sea, inhiben el apetito. La pérdida de peso es sólo uno de los beneficios del ayuno, pero posiblemente es el más buscado. Es importante que, a la vez que ayunamos, cuidemos bien la dieta, la calidad de los alimentos y el aporte de energía y nutrientes.
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Ayuno Intermitente para Principiantes
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Un fuerte abrazo,
Cristina